El logro de la lectura es todo un hito tanto en la historia de la humanidad como en el desarrollo mental y cerebral de cada persona. Las evidencias de las neurociencias cognitivas han demostrado que la lectura genera cambios en el cerebro de cada persona que ninguna otra habilidad puede lograr. Por ejemplo, antes de que se nos enseñe explícitamente a identificar sonidos individuales del habla (es decir, los fonemas), percibimos el lenguaje hablado como un continuo inseparable, pero al aprender a leer logramos identificar y dividir su estructura (fonemas, sílabas, palabras). Asimismo, cuando aprendemos a leer, algunas neuronas, que antes se dedicaban al reconocimiento de rostros, objetos, lugares, entre otros, cambian su función y se especializan en reconocer letras del alfabeto.
Puedes aprender sobre algunos de estos cambios en el siguiente video:
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